En
el año 2009, se inauguró una pequeña central eléctrica que genera energía
limpia a través de un método innovador: aprovecha la ósmosis. La turbina generadora
de electricidad de la central en Tofte (Noruega) utiliza la presión osmótica que
se produce al separar el agua dulce del agua salada, mediante una membrana. Su rendimiento
aún es mínimo -la planta produce unos pocos vatios, poco más que calentar una
cafetera- y por ello no es operativa: está en fase de prueba.
¿Qué
es la ósmosis? El movimiento de un disolvente a través de una membrana
semipermeable que hace de filtro, nada más; la singularidad de tal membrana consiste
en que el tamaño de sus poros es tan minúsculo que sólo deja pasar las
moléculas pequeñas, pero no las grandes; si pudiésemos ver disoluciones acuosas
de azúcar, observaríamos que las moléculas de agua, pequeñas, pasarían a través
de la membrana, pero no las de azúcar, más grandes. Cuando una membrana como la
descrita separa un recipiente en dos partes, una que contiene agua pura y otra
azúcar disuelto, se genera un flujo del disolvente que se mide en términos de presión
(apellidada osmótica). Los físicos han comprobado que si separan el agua dulce
–de un río- del agua marina, con una membrana semipermeable, habrá un flujo de agua
desde la disolución de menor concentración (hipotónica) salina, a la de mayor
concentración (hipertónica), hasta que el trasvase del agua iguale ambas
concentraciones (isotónicas); y midieron la presión osmótica entre ambas
disoluciones: valía cincuenta atmósferas. Esta diferencia puede usarse para
obtener energía.
Los
humanos no somos los únicos seres vivos en aprovechar la ósmosis. Las plantas,
en concreto, tienen trucos para succionar agua del suelo y subirla en contra de
la gravedad, a las hojas: como las raíces son más saladas que el suelo, el agua
pasa a su interior, para igualar la concentración de sal; el truco, como habrá
deducido el diligente lector, consiste en la intervención de la ósmosis. En los
animales, humanos incluidos, también ocurre este movimiento del agua a través
de la membrana de las células (que es semipermeable): en un medio isotónico, nada
sucede; pero, en un medio hipertónico, las células se arrugan por una pérdida excesiva
de agua; o bien se hinchan, hasta reventar, por un aumento exagerado de líquido,
en un medio hipotónico: ambas consecuencias son desastrosas para las células.
¡Qué le vamos a hacer!
2 comentarios:
algunos barcos (yo he estado en los de guerra) lo utilizan. solo para agua potable, hay que
añadir sales para que sea aceptable para el organismo.
Estimado Perico
Creo que el tema merece una aclaración.
Separemos, con una membrana de características especiales, dos recipientes llenos de agua con sal, cada uno con una concentración diferente: habrá un flujo de agua de uno al otro recipiente. Espontáneamente el agua se mueve del recipiente menos salino al más; ahora bien, gastando energía podemos conseguir que el agua fluya en sentido inverso, del recipiente de más sal al de menos. Denominamos ósmosis al primer fenómeno y ósmosis inversa al segundo.
La ósmosis inversa se utiliza para obtener agua potable desalinizando agua del mar; supongo que esta tecnología se lleva a cabo tanto en las plantas desalinizadoras terrestres como en los equipos que lleven barcos y submarinos.
Saludos
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