La
velocidad y la distancia, la temperatura y la presión son magnitudes físicas que
el profano comprende más o menos bien; no sucede lo mismo con la entropía. Ludwig
Boltzmann la definió como la cantidad de estados en los que pueden ordenarse los
componentes elementales de algo; la complejidad de la definición es tal que aún
hoy, un siglo después, se siguen investigando sus consecuencias. Probablemente el
lector experto asociará la entropía al desorden, y no anda descaminado, porque
el aumento de entropía en muchos fenómenos físicos va paralelo al aumento del
desorden: así sucede cuando un huevo se bate, un gas se expande, un terrón de
azúcar se disuelve o un sólido se funde. ¿Es la entropía, entonces, sinónimo de
desorden? La definición de Boltzmann es más refinada de lo que habíamos creído;
un interesante artículo de José A. Cuesta, publicado en el 2006, proporciona
claves para entenderla; argumenta su autor que la entropía no se identifica con
el desorden necesariamente, porque pueden crearse estructuras ordenadas y, simultáneamente,
aumentar la entropía.
Imaginemos
una sustancia cuyos componentes son esferas macizas inertes, ¿podría tener más
entropía cuando se halla en estado sólido (supuestamente ordenada) que cuando
aparece en un estado fluido (supuestamente desordenada)? El estudio del
apilamiento de naranjas nos proporciona un resultado inesperado: no resulta
difícil de entender que el volumen medio del recipiente ocupado por cada pieza
cuando la fruta está desordenada es mayor que cuando está ordenada; sin embargo,
al volumen medio accesible (¡ésta es la palabra clave!) a cada naranja puede sucederle
lo contrario: ser mayor si la fruta está empaquetada con orden que si está desordenada.
Mayor volumen disponible para cada partícula en la fase ordenada significa mayor
número de estados en los que pueden colocarse dichas partículas, luego la fase
ordenada tiene mayor entropía. Así ocurre: las esferas macizas se ordenan para
ganar volumen accesible; sucede entonces que aumenta simultáneamente el orden y
la entropía.
No,
no argumentemos que las esferas duras no existen en la naturaleza pues erraremos
en nuestra apreciación. Las partículas de las disoluciones coloidales se
comportan prácticamente como tales y por eso en los coloides se han observado
fenómenos en los que aumenta el orden espontáneamente debido al aumento de la entropía;
y no sólo en ellos, se espera que en la química celular también se presenten
procesos similares. Cierto, el físico se verá sorprendido por la aparición
espontánea del orden… si no se percata de la sutileza del fenómeno.
4 comentarios:
Estimado amigo
Para los ingenieros que estudian las máquinas térmicas la entropía es otra cosa… aparentemente.
Antes que Boltzmann definiese la entropía recurriendo a la mecánica estadística (así lo he hecho yo), Clausius la definió de una forma termodinámica (recurriendo al calor y temperatura), fácil de calcular matemáticamente y difícil de entender su significado. Más tarde se comprobó que ambas definiciones eran equivalentes.
Tú te refieres a la definición de Clausius.
Saludos cordiales
Epi
Estimado amigo
También el cálculo, usando la definición de Clausius, es más complejo de lo que parece. Considera las dos magnitudes que intervienen en la definición: tienes que usar únicamente los grados kelvin para la temperatura; y sólo puedes usar el calor intercambiado en un proceso reversible.
Saludos de Epi
Estimado amigo
1º Para simplificar la explicación voy a usar el término entropía como sinónimo de desorden.
2º Cualquier ser vivo contiene menos entropía que las moléculas que lo componen dispersas al azar. Cierto.
3º ¿Cómo es posible entonces que nazcan y se desarrollen los seres vivos? La pérdida de entropía que se genera al formarse un ser vivo queda compensada por un aumento mayor de la entropía del ambiente. De tal manera que en el universo, globalmente, aumenta la entropía.
Saludos
Estimado amigo
1º El cálculo de la entropía presenta dificultades considerables, por ello la contestación tiene que ser, necesariamente, muy técnica, y no apta para el profano,.
2º Si, como sospecho, estás tratando de resolver un problema termodinámico, considera que en el numerador de la definición de Clausius no puedes colocar el calor intercambiado por el sistema de forma irreversible. Debes imaginar un proceso reversible que acabe en las mismas condiciones que el proceso irreversible; a ese hipotético proceso le calcules el calor intercambiado; y con él operas para calcular la entropía. Como la entropía es una función de estado, el cálculo efectuado será el que necesitas.
Saludos
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