sábado, 11 de agosto de 2012

Orientación en el bosque: los musgos


En el mar bullía la vida, las bacterias pululaban por doquier, las algas se mecían al compás de las olas o permanecían fijas al suelo oceánico; pero la tierra firme permanecía desnuda, carecía de vida vegetal. La insignificante talla de los musgos y su poca vistosidad no estimulan la curiosidad del aficionado; sin embargo, constituyen las primeras tentativas vegetales por conquistar los continentes desnudos; un intento meritorio, aunque limitado: porque los musgos no han inventado las raíces, ni la flor, ni el fruto, ni la semilla. ¿Qué hicieron entonces para diferenciarse de las algas? Comenzaron la especialización, dividieron el trabajo entre un órgano conductor del agua, el tallito, y las hojas. Las hojas, auténticas baterías solares, aparecieron por primera vez en la Tierra, y con ellas aumentó la superficie que ofrecen las plantas al Sol para absorber más energía. No hicieron más y su incapacidad para producir madera los condenó al enanismo, pero su inventó les llegó para comenzar la colonización de las superficies emergidas, hace cuatrocientos cincuenta millones de años. En el presente los encontramos en las áreas húmedas; tanto en las selvas como en las ciudades, ya en los bordes de ríos, ya entre las piedras de los edificios o en el pavimento de las calles; pero dondequiera que se asienten, requieren agua para que ocurra la fertilización. No desdeñe el lector altivo estas plantas porque todavía cumplen una función en los ecosistemas actuales: debido a su alta capacidad de absorción de agua, retienen la humedad del suelo y evitan su degradación.
¿Le gusta al lector intrépido pasear por el bosque? Si es así, le resultará fácil orientarse durante un día nublado. Fíjese en el lado de las rocas y árboles que tenga más musgo: en esa dirección se hallará el norte, porque el lado opuesto, el que mira al Sol – el sur en el hemisferio norte - carece de agua suficiente para que los musgos vivan. Conocemos mejores usos para estos vegetales: los musgos Sphagnum son el componente principal de la turba, que se utiliza como combustible, o se agrega al suelo en la horticultura, o vale para ahumar la malta del afamado whisky escocés; incluso durante la Segunda Guerra Mundial, y debido a sus suaves propiedades bactericidas, los musgos fueron utilizados como primeros auxilios en las heridas de los soldados. 
Una última indicación que tranquilizará al amante de las plantas: los musgos secos pueden no estar muertos, algunos sobreviven desecados y reviven horas después de su rehidratación.

4 comentarios:

C. Armesto dijo...

Estimado amigo

Los caribúes se alimentan de líquenes durante el invierno ártico, cuando ningún otro vegetal vive.
Sí, existen unos vegetales semejantes a los musgos que no son musgos: se trata de las hepáticas y antocerotas.

Saludos cordiales.
Epi

C. Armesto dijo...

Estimado amigo

Creo que tu confusión se debe a que un mismo vocablo botánico se usa con dos significados diferentes: briofito sensu stricto se refiere a los musgos exclusivamente; pero también se usa el vocablo sensu lato, en tal caso briofito se refiere a los tres grupos de plantas los musgos, antocerotas y hepáticas. En cualquier caso, aunque son plantas terrestres no vasculares, se trata de grupos diferentes.

Saludos cordiales de Epi

C. Armesto dijo...

Estimado amigo

Tanto los musgos como los helechos no tiene flores, ni frutos, ni semillas; sin embargo, sí pertenecen al reino vegetal.

Cordiales saludos

C. Armesto dijo...

Estimado amigo

Puedes inhibir el crecimiento del musgo disminuyendo el agua, aumentando la exposición a la luz solar directa, también aumentando el pH del suelo.

Saludos cordiales