sábado, 30 de julio de 2011

Medicamentos habituales


Quizá pueda interesar, al lector curioso, la lista de los medicamentos más recomendados a sus pacientes por un médico amigo.

Los antibióticos no matan virus, sino bacterias, que no es poco; y ni siquiera todas, cada antibiótico afecta a unas y no a otras; aún así, que nadie los minusvalore: son los fármacos que más vidas han salvado.

Los analgésicos calman el dolor. ¿El mejor analgésico? El que menos efectos colaterales produzca, quizá el paracetamol.

La mayoría de las personas ignora que la inflamación es un proceso para defenderse de una agresión. Cuando un agente agresivo actúa, las células afectadas liberan prostaglandinas, que producen la inflamación. Los antiinflamatorios -la aspirina (el ácido acetilsalicílico) es el más famoso- impiden la hinchazón de la parte afectada, el enrojecimiento y el dolor, porque inhiben la liberación de las prostaglandinas.

El polen del aire o la ingestión de un fármaco o de un alimento puede desencadenar, en el sujeto sensible, una reacción alérgica, cuyos síntomas van desde las ronchas o manchas en la piel, los estornudos y el ardor de ojos, hasta los vómitos y las diarreas. Un antihistamínico logra que desaparezcan los síntomas, porque impide que actúe la histamina, el mensajero químico que interviene en las reacciones de respuesta del sistema inmunitario.

La ansiedad, un frecuente estado psicológico desencadenado por el estrés o la frustración, se debe a una alteración de los circuitos de neuronas, acompañada de un desequilibrio químico de los mensajeros neuronales. Los ansiolíticos controlan sus síntomas que, como bien sabe el paciente, abarcan varios órganos.

Los antiespasmódicos relajan los músculos lisos y aminoran el dolor de los cólicos (retortijones). El dolor se origina en las vísceras huecas -intestino, estómago, vejiga, uréteres, trompas de Falopio o vesícula biliar- cuando se irritan: por toxinas de alimentos mal conservados, por el paso de un cálculo renal o debido a un cuerpo extraño.

Los corticoides (o corticosteroides) actúan, simultáneamente, como un inmunosupresor y un antiinflamatorio; también son hormonas por lo que su uso puede disminuir la producción interna, con el riesgo consiguiente para la salud; además, abolir los mecanismos inflamatorios normales es peligroso, pues los virus se desarrollan más rápidamente.

El paciente siempre deberá tener presente que cualquier fármaco, también el que acaba de salvarle la vida, presenta efectos colaterales perniciosos. Y no debe olvidar que la mayoría de los medicamentos son expulsados a través del hígado y riñón, por lo que pueden alterar el funcionamiento de ambos órganos. Lector aprensivo, toma solamente los medicamentos imprescindibles.

1 comentario:

C. Armesto dijo...

Estimada amiga

Las benzodiacepinas (diazepam entre otros) son ansiolíticos.
La buscapina (butilescopolamina) es un antiespasmódico que se utiliza para el tratamiento de dolores intestinales.
Entre los corticoides puedo citar la cortisona y la dexametasona.

Ante todo, no te olvides, sólo se deben tomar los medicamentos que te aconseje tu médico.

Saludos de Epi