El
lector profano seguramente asociará el magma con la lava de los volcanes. Yerra
en su apreciación. Más de quince kilómetros cúbicos de roca se fundan cada año
en la Tierra. A esta enorme masa de magma, las erupciones volcánicas que vemos
sólo aportan una décima parte: el resto vuelve a convertirse en roca en el
interior de la corteza o en las profundidades oceánicas. El resultado del
proceso es que el planeta se enfría, libera calor y al hacerlo produce nuevas
porciones de corteza terrestre ligera, que se añaden a las antiguas para
generar los continentes - la espuma de la Tierra, tal como se han nombrado-.
¿Dónde
se producen los magmas? Recordemos que la superficie terrestre está dividida en
placas. La mayor parte, el ochenta y uno por ciento, se producen en los bordes constructivos
de las placas, en las dorsales; el doce coma cuatro, en los bordes destructivos,
en las zonas de subducción; y el seis coma seis debajo del interior de las
placas. Las erupciones volcánicas, aún las más gigantescas, no son más que
indicios de un proceso más vasto que se desarrolla continuamente desde el origen
de nuestro planeta.
Antes
de preguntarnos cómo se funden las rocas consideremos que el interior de la
Tierra está caliente; el núcleo interno sobrepasa los seis mil setecientos
grados centígrados; si, a pesar de la elevada temperatura, las rocas permanecen
en estado sólido se debe a la tremenda presión a la que están sometidas. ¿De
qué maneras, entonces, se funden las rocas? Calentándolas, si están frías, o
mediante descompresión, si ya están calientes; resulta menos complicado, pero
igual de eficaz recurrir a la adición de agua. La intensa producción de magmas
en las dorsales, Islandia constituye el caso más evidente, se explica aludiendo
a la descompresión del material sólido que asciende del manto. En las zonas de
subducción, en cambio, como en los Andes o el Japón, la formación de magmas se
debe al calentamiento, ocasionado por el calor que genera la fricción de los
materiales que se introducen en el interior terrestre, al que se suma el agua
presente en la zona. En el interior de las placas el proceso de formación de
magmas es más sencillo: un punto caliente bajo una placa produce muchas islas
volcánicas; la descompresión, consecuencia de una fractura importante, en una
falla, explica la aparición de un volcán, éste podría ser el origen de las
islas Canarias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario